¿Sabías que el Concilio de Trento tomó en gran consideración la función eclesial de la catequesis? Declaró la obligación de la predicción y de la catequesis a los párrocos y curas de almas; a los párrocos prescribió hacer la catequesis en la preparación a los Sacramentos; a los Obispos, Arzobispos, Primados y a los diversos Ordinarios hace obligación de exponer la Sagrada Escritura “para que el tesoro celeste de los libros sagrados no venga olvidado”, instituyendo el oficio del Canónigo teólogo, que era el biblista y catequista oficial de la Diócesis.
¿Sabías que la corriente psico-pedagógica de Marie Fargues pretende la adaptación de la educación religiosa a la psicología y a la personalidad en formación? Busca la centralidad y especificidad del niño, respetando las leyes psico-pedagógicas de su mundo: llevando a rechazar la tradicional metodología catequística, incorrecta en sus fundamentos psicológicos, pues no implica el interés del niño y no lo lleva a adherir las verdades aprendidas; proponiendo el método activo y progresivo, basado este último no tanto en la objetividad del catecismo (del que no excluye su memorización), sino en la progresión psicológica, según los intereses del niño, para una mejor asimilación vital de los conocimientos. El ambiente debe ser agradable, libre de obstáculos para el aprendizaje y la actividad del niño. La figura el catequista es muy importante, alejándolo de la esclavitud del pupitre y valorizando también la liturgia y la Escritura.
¿Sabías que la corriente kerygmática también es conocida como la corriente de la predicación o del anuncio, pues está propuesta en función de la predicación de la Palabra de Dios? Es consciente de que el mensaje cristiano ha perdido su carácter de buena noticia, pues parece que todo se reduce a un deber y convirtiendo la religión en un cristianismo de hábito o mínimos. La teología debe explicar, argumentar y defender la verdad cristiana; pero la catequesis y la predicación están más al servicio del kerygma, anuncio con lenguaje histórico-bíblico y no con categorías teológicas. La escritura no debe usarse como argumento de autoridad, sino como fuente principal. La catequesis debe ser cristocéntrica, y el catequista debe presentar la religión como historia, desmembrando esta en pequeñas porciones, interrogando a los niños y estimulándolos a responder, verificando su comprensión y capacidad para expresarlo.
¿Sabías que la corriente del Activismo estaba convencida de que la catequesis no puede limitarse a facilitar el aprendizaje de las verdades de fe? Sino que debe guiar al catequizando sobre todo a la acción, a la realización de una auténtica conducta religioso-moral. Así, los catequizandos asumen un papel activo durante el encuentro catequístico, pues trabajan (diseñan, pintan, buscan pasajes e historias bíblicas, las reproducen escénicamente, discuten, recogen en carpetas el material trabajado…). Se reclama la experiencia (religiosa), como sinónimo de vida (religiosa): el catequizando debe experimentar la fe y vivirla integralmente, con la mente y el corazón.
¿Sabías que los primeros recursos didácticos al servicio de la catequesis alrededor del 1800 estaban destinados a ayudar a aprender de memoria el catecismo? Entre otros medios destacamos el uso de los versos, los ritmos, los premios, las disputas o carreras catequísticas, el canto, la contemplación de las imágenes…
¿Sabías que a lo largo de la historia muchos han sido los servicios desempeñados en la catequesis? En primer lugar, hay que agradecer todo el trabajo realizado por los catequistas verdaderos y propios. Pero también estos se han sentido afortunados con la ayuda de los consejeros, cancilleres o secretarios; asimismo, los porteros y silenciadores han contribuido para conseguir disciplina y orden en las sesiones; los pacificadores, que supieron dirimir desacuerdos; los enfermeros se dedicaron a visitar a las familias enfermas de los catequizandos; y, finalmente, los pescadores recorrían las calles llamando a la catequesis. Como veis, toda ayuda es importante al servicio de la comunicación de la Palabra de Dios.
¿Sabías que los grandes movimientos reformadores de la catequesis comenzaron reformando el método? Se llevó a cabo una renovación formal de la catequesis, después de una revisión crítica del cómo llevarla a cabo. El segundo momento de la reforma llevó a la renovación material, cuando se hubo detectado problemas de contenido en una revisión crítica del qué enseñar en la catequesis.
¿Sabías que el nuevo Directorio para la catequesis publicado en 2020 es el tercer directorio que nos ofrece la Iglesia para el mejor desarrollo de esta función eclesial? Entre sus notas novedosas y que nos hablan de su oportuna actualización destacamos las referencias: a la cultura digital; a la dimensión sinodal dentro de la Iglesia; el apoyo a la catequesis kerigmática; la dimensión mistagógica en la valorización de los signos litúrgicos y la implicación de toda la comunidad; así como el recurso a la Via pulchritudinis, camino de la belleza, como fuente de la catequesis y medio para la transmisión de la fe; y, finalmente la valorización del silencio, como camino para la contemplación del misterio.
¿Sabías que en 2013 el Papa Benedicto XVI transfiere a través de la Constitución Apostólica Fides per doctrinam, en forma Motu proprio, la competencia sobre la catequesis, hasta entonces detentada por la Congregación para el Clero al Consejo Pontificio para la Promoción de la Nueva Evangelización? Benedicto XVI quiso ofrecer a la catequesis un puesto relevante y un instrumento adecuado a su servicio en la curia romana para que: atendiera la promoción de la formación religiosa; emanara normas oportunas para que la enseñanza de la catequesis se imparta de modo conveniente; vigilar la formación catequística; aprobar los catecismos y demás escritos relativos; y asistir a las oficinas catequísticas de las Conferencias Episcopales.
¿Sabías que en 2010 el Papa Benedicto XVI instituye a través de la Carta Apostólica Ubicumque et semper, en forma Motu proprio, el Consejo Pontificio para la Promoción de la Nueva Evangelización? Su finalidad es estimular la reflexión, así como descubrir y promover formas e instrumentos para realizar la nueva evangelización. Debe colaborar con los demás dicasterios y organismos de la Curia Romana, al servicio de las Iglesias particulares, especialmente en los territorios cristianos secularizados. Entre sus tareas destacan: profundizar el significado teológico y pastoral de la nueva evangelización, estudiar y favorecer el uso de las formas modernas de comunicación, así como promover el uso del Catecismo de la Iglesia Católica como instrumento necesario.
¿Sabías que en 1935 el Papa Pío XI a través del Decreto Provido sane solicita la institución de la Oficina Catequística Diocesana en todas las diócesis? Se trata del instrumento promotor de la acción catequística diocesana y que hoy conocemos como Delegación Episcopal de Catequesis en nuestra Iglesia particular.
¿Sabías que en 1923 el Papa Pío XI instituyó la Oficina Catequística Central por medio del Motu proprio Orbem catholicum? Se trata de la oficina considerada como centro vital y mundial en el seno de la Curia Romana por cuanto tuviera que ver con la organización catequística. Dada la ignorancia religiosa en las naciones católicas, promueve el más necesario y santo ejercicio del ministerio catequístico, con el propósito de ejercitar para toda la Iglesia el cuidado y vigilancia de la catequesis.
¿Sabías que el origen de la catequética se sitúa en el primer período inmediatamente sucesivo a la clausura del Concilio de Trento? En 1567 se instituye la primera cátedra ad hoc denominada “Professor catechismus” en la Universidad de Lovaina (Bélgica): se enseñaba los domingos y los días festivos, porque los demás días estaban ocupados por las materias más tradicionales y consideradas “las más importantes”. Más tarde, en 1774, la emperatriz María Teresa de Austria promulga los Estatutos de la Facultad Teológica de Viena, donde la ciencia Catequética encuentra su lugar como parte de la Teología Pastoral.
¿Sabías que la obra de San Agustín titulada “De catechizandis rudibus” es considerado el primer tratado de metodología catequética? Datada por el 399-404 es definida como una “carta a los catequistas”. En verdad, no se trata de una carta pura y simple dirigida a su amigo el diácono Deogratias, sino de algo mucho más amplio, sistemático y universal. Está destinada a aquellos que tuvieran el ministerio de iniciar a la fe a cuantos pedían ser instruidos en la doctrina cristiana y que encontraban algún problema o dificultad en el “hacer catequesis”. San Agustín se dedica a ella como un deber que deriva de su propio ministerio al servicio de la Palabra de Dios. El obispo Agustín ya ha alcanzado una elevada madurez de pensamiento y escribe esta reflexión sobre el acto de enseñar y el proceso de aprendizaje. Dividido en dos partes: en la primera, de carácter pedagógico y de formación catequética presenta unas normas a seguir y unos defectos a evitar en los encuentros catequísticos; en la segunda parte presenta dos ejemplos prácticos de catequesis.
¿Sabías que los grados formales del Método de Mónaco (o Münich) son cinco?
- Preparación. El objetivo es despertar el interés del niño a través del enganche a la lección precedente (lo ya conocido) con preguntas que impliquen al catequizando. Se debe decir la finalidad de la lección para despertar el interés, configurando una clara unidad didáctica.
- Presentación o exposición. Se comunica la verdad o normal moral de manera intuitiva y atrayente, recurriendo a una historia (bíblica), una parábola, una comparación… que contenga el contenido doctrinal o moral.
- Explicación. El catequista conduce, por inducción, de lo particular-concreto a lo general-abstracto, pues el pensamiento de los catequizandos es guiado de lo superficial a lo profundo. Se puede hacer con preguntas, dialogo, palabras clave… implicando a los destinatarios, para que, de oyentes pasivos, se transformen en protagonistas.
- Síntesis o resumen o recapitulación. Es una recogida de los resultados de la explicación, en colaboración activa de los catequizandos, con la ayuda de las palabras clave. El catequista muestra la concatenación armoniosa de las verdades aprendidas con otras de la fe cristiana. Sólo en este punto es oportuno el uso del catecismo, como síntesis a aprender de memoria.
- Aplicación. Es el momento de la acción para dirigir las ideas y propósitos hacia la vida cotidiana. La voluntad debe ser solicitada para poner en acto cuanto ha sido conocido y comprendido. Debe iniciar en la catequesis para llevarlo a la vida. Conviene usar una breve historia, la liturgia u oración final.
¿Sabías que en Münich comenzó la renovación del método en la catequesis? Estos reformadores de la catequesis, aprendiendo en la escuela de los modernos maestros de la pedagogía, apuntan: a la necesaria inteligibilidad de los contenidos, no sólo a la memorización del catecismo; a conocer las modalidades del aprendizaje humano, gracias a las indicaciones de la psicología; a concebir la lección de catequesis como una unidad completa en sí misma, en la que se debe decir el objetivo de la misma al inicio, partiendo siempre de la concreto ya conocido; y llevar al conocimiento por medio de grados formales.
¿Sabías que la Confraternidad de la Doctrina Cristiana se inició en Milán en el año 1536? Su fundador fue el sacerdote Castellino da Castello. Se trata de una Compañía de catequistas al servicio de la catequesis y de la primera alfabetización. Su éxito perduró por muchos siglos: apoyado por San Carlos Borromeo, los jesuitas y diversos papas; a desarrollar en todas las parroquias en 1900 auspiciado por la Santa Sede.
¿Sabías qué una de las formas y expresiones de la catequesis en el 1800 eran las llamadas conferencias apologéticas? Estaban destinadas a las clases más instruidas de la sociedad. Y pretendían contrastar la cultura que se iba consolidando entre las clases cultas impregnadas de pensamiento iluminista, cientificista y positivista. La expresión más notable y duradera fueron las Conferencias de Nôtre-Dame de París.
¿Sabías qué en la Parroquia-Seminario de París de San Sulpice hubo un tentativo de renovar la catequesis con un método cuyas características eran: el acto catequístico es un acto religioso (no escolástico); el alumno no es colegial, sino cordero de la grey de Cristo; el catequista no es profesor, sino pastor, ministro ordenado; hace catecismo con vestimentas litúrgicas, en la iglesia, cuidada por los catequizandos; en el encuentro hay doctrina, canto, lectura del Evangelio, homilía, etc.
¿Sabías que… el término “catecumenado” deriva de la lengua latina eclesiástica? Y que a su vez la ha tomado en préstamo de la lengua griega; significa literalmente “instruir a viva voz”, y tenía el fin de hacer resonar el anuncio ya precedentemente recibido.
¿Sabías que… en la época apostólica, se va configurando una sencilla estructura catequética? Se trata de un itinerario de aprendizaje de la vida cristiana, tal y como atestigua Hch 2, 42-47, y que abarca los siguientes elementos:
- La enseñanza de los Apóstoles: el Evangelio atestiguado por los Apóstoles.
- La vida en común: un nuevo estilo de vida según el Evangelio en comunidad y compartiendo los bienes.
- La participación en la fracción del pan: hacer memoria de lo que hizo Jesús.
- La perseverancia en la oración: alabar y dar gracias al Señor.
Cfr. J. Andión – F. Enríquez – L. Otero, Fundamentos de la catequesis, Madrid, PPC 2005, 70.