98 | ¿Sabías que…?

¿Sabías que uno de los límites del catecismo en el Siglo XIX era que es magisterial-expositivo? No va, de hecho, olvidado que la enseñanza, sea aquella profana, que aquella religiosa, está fundada sobre el principio de autoridad. En esta óptica, ampliamente compartida, el catequista es el actor principal si no es el único. En general, el catequizando juega un papel pasivo: escucha y repite fielmente cuanto el catequista-profesor le propone. Una participación más activa al proceso de enseñanza le es generalmente excluida. Pobre es la atención a sus exigencias, como los ritmos de aprendizaje y el nivel de maduración personal. Se comprende fácilmente, en este punto, cómo muchos catequizandos muestran una evidente desafección hacia el catecismo.


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