Directorio para la catequesis, 121
A través de su inserción en el mundo, los laicos prestan un servicio muy valioso a la evangelización. Su específica manera de vivir como discípulos de Cristo es una forma de anuncio del Evangelio. Comparten todas las formas de compromiso con otras personas, impregnando las realidades temporales del espíritu del Evangelio. La evangelización «adquiere una característica específica y una eficacia singular por el hecho de que se lleva a cabo en las condiciones comunes del mundo» (LG, n. 35). Los laicos, al dar testimonio del Evangelio en diferentes contextos, tienen la oportunidad de interpretar los acontecimientos de la vida de manera cristiana, de hablar de Cristo y de los valores cristianos, de dar razones de sus decisiones. Esta catequesis, por así decirlo espontánea y ocasional, es de gran importancia porque está íntimamente relacionada con el testimonio de vida.