La liturgia es una función eclesial especial que podemos aprovechar en la catequesis para acercar a los catecúmenos, neófitos y fieles al misterio de Cristo.
Cada tiempo litúrgico será, pues, una oportunidad para nuestras catequesis, recurriendo, como no podría ser de otra manera, a la Sagrada Escritura, los signos y símbolos, la belleza de nuestras celebraciones y la tradición eclesial.
Con el tiempo de Pascua nos disponemos a vivir la alegría de la Resurrección de Cristo. Jesús Resucitado se apareció a sus discípulos y se dispusieron a releer todos los acontecimientos del Señor a la luz de la Resurrección. La vida de la Iglesia y la misión recibirían el impulso del Espíritu Santo.
Aprendamos a descubrir que Cristo vive en medio de nosotros y a testimoniarlo a los demás con la fuerza del Espíritu.